Por: Segundo Matta Colunche
Dirigentes sociales se solidarizan con Fernando Chuquiruna |
Deslegitimada,
repudiada y odiada así está Yanacocha. Solo sus más cercanos voceros mediáticos
hacen alarde de la “gran empresa” o “la pulcra minera”; tal es su fanatismo,
que se encierran entre ellos a palmearse sobre hechos repudiables que atentan
contra el agua de los pobladores y, a su vez, esperan que PPK les haga el
milagro de Conga.
Hace
unos días, pobladores de Baños del Inca cuestionaron utilización de sus aguas
para actividades mineras. Amenazaron empezar medidas de protesta si la
Autoridad Nacional del Agua (ANA) no anula resolución que favorece a Yanacocha.
La noticia avanzó con fuerza en redes sociales y algunos medios, puesto que, ya
es casi un consenso nacional, que Yanacocha no va más en Cajamarca.
Sin
embargo, para contrarrestar la presión y protesta del movimiento social,
salieron a relucir los más gárrulos “troll´s mineros”, insultando y difamando a
quienes defendemos las cabeceras de cuenca. Desde twitter y facebook se lanzaron
los acostumbrados psicosociales. Su prensa adicta –sin mediar investigación y
objetividad– hicieron eco de tan lamentables acusaciones, en contra de
dirigentes y funcionarios del gobierno regional.
La
desesperación es tal, lanzan toda una guerra sucia contra opositores de
Yanacocha. Esta batalla ya la hemos visto y los resultados son previsibles. Lo
lamentable de esta vez, es que no sólo tocan la vida personal de los
ambientalistas, sino también, organizan grupos para agredirlos y difamarlos.
Esto debe llamar la atención de la policía y la fiscalía. ¡Cuidado que
Cajamarca puede estar anidando futuros sicarios!
Por
ello, creemos que lo sucedido hoy con el abog. Fernando Chuquiruna Gallardo, no
es casual. Es planificado y obedece a toda una campaña de desprestigio. Esto a
pesar de que, no estamos de acuerdo con la irresponsabilidad personal, creemos que
todo tiene su espacio. Hacer escarnio de la vida personal es ruin y cobarde.
Estamos seguros que si levantamos la leve cortina que cubre la familia,
encontraríamos mil defectos en todos los que hoy se regocijan con el
sensacionalismo prominero.
Yanacocha
debe entender que su ciclo ha terminado, que estas herramientas solo la
deslegitiman más. Creer que atacar a Chuquiruna es vencer a los ronderos de La
Sacsha, que luchan por su agua, es una estupidez del tamaño del sol. Allí, las
cosas están que arden. Y son pocos medios que escarban más allá de la versión
oficial de la minera.
Todo
ser humano comete errores. Rectificarlos es cuestión de principios. Fernando
Chuquiruna, responderá por sus problemas personales, sin duda; pero lo que no
debemos permitir, es que, se amenace y se atente contra la salud y bienestar
del dirigente. Nuestra solidaridad. Alto a la persecución y matonería.