Por: Segundo Matta Colunche
Abogado Wlfredo Chero, familiares, amigos de 6 cajamarquinos detenidos en la parte externa del Poder Judicial-Chiclayo |
Constitución Política del Estado: artículo No.
08, inciso 01, 02 y 03 determina que: “Toda persona tiene derecho a la
libertad y a la seguridad personal. Nadie puede ser privado de su libertad
física, salvo por las causas y en las condiciones fijadas de antemano por la
Constitución Política del Estado o por
las leyes dictadas conforme a ellas. Nadie puede ser sometido a detención o
encarcelamiento arbitrarios”. Sin embargo, 6
ciudadanos, del distrito de Huasmín-Cajamarca, vienen siendo acusados por la
supuesta culpabilidad en los delitos de: Tenencia ilegal de armas, homicidio
calificado, resistencia a la autoridad y violación a la propiedad privada. Nada
más absurdo calificar a los ronderos de actos terroristas cuando fueron precisamente
las rondas las que lucharon contra el terrorismo.
La privación de la libertad por más de 24 horas a los
ciudadanos cajamarquinos: Andrés Hernández, Herenías Rodríguez Vargas, Marco
Tocas Rodríguez, Fredy García Becerra, Waldir Medrano y Nolberto Medina
Becerra, es un acto arbitrario y anticonstitucional, afirman profesionales del
Colegio de Abogados de Lambayeque y el abogado defensor, el lambayecano
Wilfredo Chero. Sin duda, nada puede justificar que, el Ministerio Público y el
Poder Judicial, hayan actuado infundadamente en contra de personas que radican
en lugar donde, por más de 2 años, se desarrolla una resistencia social en
contra del proyecto minero Conga.
Claro está, que la policía para cargarlos de delitos
puede usar las estrategias más sucias, que sólo pueden nacer en la cabeza de
furiosos verdugos. Todos sabemos, que la gran mayoría de ciudadanos de:
Huasmín, Sorochuco, La Encañada, Bambamarca y Celendín, se han mostrado a favor
de la inviabilidad de Conga. Lo curioso y hasta sospechoso, es que Cajamarca ha
pasado a ser un apéndice de Chiclayo; ya que, todos los denunciados han sido
llevados a esta ciudad para ser procesados mientras duren las investigaciones
del caso, e incluso están siendo amenazados de ser trasladados a Lima.
Como se sabe, no se puede hacer escarnio de un
grupo de campesinos al pretender: achacarlos, mediatizarlos, humillarlos cual
viles delincuentes; porque, seamos claros, el único delito que se les puede
acusar es: “Ddefender con dignidad sus recursos naturales y mostrar rechazo a
empresas abusivas como Yanacocha”. Ya lo decía Galeano: “La justicia es como
las serpientes, solo muerde a los descalzos”. Quizá si sus nombres fueran: Alan
García o Keiko Fujimori ya estarían libres.
Por otro lado, a todos los peruanos, que han sido
detenidos por tenencia ilegal de armas, han sido investigados en libertad,
salvo casos extremos como acusaciones por: terrorismo, narcotráfico y
delincuencia calificada. El caso de Huasmín, no es otra cosa que “persecución y
amenaza a líderes sociales y autoridades para evitar más manifestaciones en
contra del cuestionado proyecto minero Conga”. Además, a Benavides y Ollanta
les conviene acusarlos por delitos que, a nuestro modo de ver, jamás se han cometido.
Una cosa que indigna y a la vez preocupa es que “se sigue
denunciando a dirigentes sociales, autoridades regionales y locales”; ante ello, debemos preguntarnos: ¿Qué quieren
hacer con Cajamarca? ¿Convertirla en una región sumisa al poder transnacional?
¿Seguir pisoteando la dignidad de un pueblo que ha sabido defenderse con
valentía? ¿Manchar la honra de líderes sociales y políticos para imponer sus nefastos
intereses? ¿Destruir la última región donde la población es altamente rural? Ante
estas incógnitas, sólo queda una salida: “Seguir manteniendo la más amplia
unidad para fortalecer la resistencia y lograr la soberanía regional que aspire
al desarrollo sostenible del pueblo cajamarquino”.
Por ello, el Gobierno Regional Cajamarca, expresa
su solidaridad con los 6 hermanos detenidos y, al mismo tiempo, exige su
urgente libertad. Asimismo, queremos agradecer a los cientos de ciudadanos que
han llegado hasta la carceleta, del Poder Judicial de Chiclayo, para expresar
su solidaridad. Seguros estamos, que está guerra venceremos.