Por: Segundo Matta Colunche
Presidente Gregorio Santos es paseado en hombros por campesinos |
A
40 minutos de la ciudad capital de la provincia de Chota, se ubica el Centro
Poblado “Sarabamba”. Hasta allí llegó, el pasado viernes 28 de febrero, el Presidente
Regional de Cajamarca, Gregorio Santos Guerrero, para entregar una moderna
infraestructura educativa a los pobladores de la comunidad.
Sarabamba (Chota), es
una tierra noble y hermosa que irradia generosidad a través de su gente. En el
rostro de cada poblador se refleja la pobreza que carga la gran mayoría de peruanos,
producto de la insana y apátrida clase política que ha gobernado y gobierna el
país. Para los dueños del Perú, no existe “Sarabamba” ni ningún otro lugar
donde haya grandes necesidades por resolver. “Somos el país que más crece en el
mundo y su economía es envidiable”, nos dicen: mientras niegan la cruda realidad
de ese Perú profundo.
Entre pampas,
laderas, quebradas, ríos, bosques y grandes extensiones de rocas (milagro de la
naturaleza) llegamos a Sarabamba; está vez, acompañamos al Presidente Regional a
entregar una moderna infraestructura educativa para los niños del pueblo. Los primeros
que nos dieron la bienvenida fueron dos pobladores de avanzada edad (64 y 67
años respectivamente), cuyo trato jovial tenía la fuerza maravillosa de la juventud.
Sus gestos hacían recordar la frase célebre de Gonzáles Prada: “Los viejos a la
tumba, los jóvenes a la obra”; que indudablemente no se refería a la edad
cronológica, sino al entusiasmo que pone el ser humano en pos de lograr el
desarrollo de los pueblos.
Minutos después
arribó el Presidente Regional, Gregorio Santos Guerrero, quien fue recibido por
niños, madres, padres de familia, juventud y delegaciones que llegaron de
diferentes caseríos. Los dirigentes traían una serie de pedidos y necesidades
para presentarlo ante la autoridad regional. Durante el reencuentro del
presidente con sus compañeros ronderos, se compartieron anécdotas, historias y
hasta duros recuerdos, en los momentos en que se trabajó para fortalecer las
Rondas Campesinas. Pocos le llamaban presidente: la mayoría le trataban como
“Goyo” o “Goyito". Términos de cercanía y compañerismo. También, llegaron los
ronderos de “Toguza”, distrito de Chiguirip, que en señal de alegría cargaron
en hombros al Presidente Regional. No hay nada más auténtico que el afecto
espontáneo de la gente más humilde.
En la ceremonia de
inauguración de la infraestructura educativa, que tiene una inversión de 1 millón 332 mil 300 soles (colegio integral), se
empezaron con las palabras de autoridades locales quiénes manifestaron un agradecimiento unánime a Gregorio Santos
Guerrero. Incluso, una niña sorprendió con un poema en cuya letra latía la
realidad de su caserío.
Por último, Santos
resumió el objetivo de la obra con estas simples palabras: “No acostumbramos
mucho a poner primeras piedras, pero si las últimas. Como ésta infraestructura,
que quedará para que los hijos de los ronderos estudien en mejores
condiciones”.
Los sentimientos de
emoción, en el desarrollo de actividades programadas por el primer aniversario
de creación su centro poblado y la concreción de la moderna infraestructura
educativa de la población de Sarabamba, se sentían a flor de piel. Como
gobierno, sabemos que hay muchos pueblos que tienen grandes necesidades y que vale
la pena luchar por ellos: porque pueblos como Sarabamba también existen.