jueves, 12 de julio de 2012

Voces vivas en defensa de la vida


Por Segundo Matta Colunche

Hechos sucedidos en Cajamarca, no sólo enlutaron a familiares directos de 5 hermanos asesinados en Celendín y Bambamarca, sino a todo un pueblo que clama justicia.

La derecha siempre minimizó las luchas del pueblo, los caminos neoliberales guían su actuar  de “sacar de la pobreza” a costa de destruir los recursos naturales y sumir a las mayorías en las peores condiciones de sus existencia. El desprecio al pueblo siempre se dejó sentir por quienes ostentan el poder, catalogan al pueblo como un minúsculo grupo de manifestantes, radicales, violentistas, antimineros, terroristas y anti desarrollo, adjetivos usados para desprestigiar liderazgos sociales y políticos de sectores progresistas.

Sin embargo, en medio de toda esta distorsión interesada de los grupos de poder, salen voces vivas, de las organizaciones que viven y conocen la realidad y el sufrimiento del sector popular; ahí está el movimiento social que no espera recompensas, sino que actúa como soldado de la libertad y la justicia. (Frentes de Defensa, Rondas Campesinas, Centrales sindicales y populares, federaciones, organizaciones juveniles, religiosas, etc.).

Durante los últimos días las muestras de solidaridad han venido desde el sector popular hasta la intelectualidad; desde clubes y organismos sociales internacionales hasta la voz del poblador de barrio o caserío, desde los artistas cotizados en escenarios de la burguesía hasta el que canta y baila con cajita y clarín, desde el anciano que sigue desde su televisor o radio paso a paso la lucha del pueblo, hasta el niño que pinta o baila para defender su futuro, en fin todos los sectores asisten a fortalecer la grandeza y dignidad de los pueblos.

Muchos pronunciamientos de solidaridad se difunden en medios escritos, radiales, televisivos, redes sociales y espacios públicos: el Frente de Defensa por la no contaminación del Valle La Leche-Lambayeque, luego de expresar la solidaridad con Cajamarca exige al gobierno humalista el levantamiento urgente del Estado de Emergencia, respeto a la vida e investigación y sanción ejemplar a responsables de la muerte de 5 hermanos cajamarquinos, además de pedir libertad para los detenidos.

La Iglesia Católica siempre está presente en momentos en que el pueblo necesita, sacerdotes y religiosos del Decanato de Cajamarca expresan también a través de un pronunciamiento su profunda y sincera solidaridad con los familiares de los 5 hermanos asesinados, los heridos y detenidos a consecuencia de la defensa por el agua y el medio ambiente. En un acápite del documento recuerdan las frases celebres del creador: “Yo he venido para dar vida a los hombres y para que la tengan en plenitud” (Jn. 10, 10), y afirman que en su misión evangelizadora la iglesia anuncia el valor de la vida y el respeto de los derechos fundamentales de la personas, promueve actitudes de respeto por la naturaleza, una cultura de paz y diálogo.

Al igual que el Colegio de Abogados de Lambayeque y Cajamarca, hoy el Colegio de Contadores Públicos de Cajamarca, en pronunciamiento difundido en el diario “El Mercurio”, expresa su preocupación por los hechos sucedidos en nuestro pueblo.

“Los hechos lamentables y dramáticos que enlutan a familias cajamarquinas y al país, nos recuerdan sucesos y tiempos que creíamos superados, en donde proyectos de Empresas Trasnacionales se imponen sobre la vida humana, como la tragedia de Bagua, Espinar, y otros. El Gobierno Central ha desatendido el clamor popular de la región, en su justo reclamo en defensa de la vida, el agua, la salud y el perfecto equilibrio del medio ambiente… no ha tenido la sabiduría para escuchar y mucho menos buscar un verdadero diálogo con la sociedad en su conjunto. Los profesionales cajamarquinos exhortan el cese inmediato de la violencia y la generación de condiciones para el establecimiento de un proceso real en pro del desarrollo de la región y por ente de nuestro país”, afirman.

Centenares de organizaciones y millones de peruanos que se movilizaron hoy, son voces vivas que defienden la vida y que muchas veces no son escuchadas. La unidad del pueblo se siente reclamando la transformación del país abandonado por quienes nos gobiernan.