Por Segundo Matta Colunche
Cuando decimos el periodismo decente si existe, es porque nos estamos refiriendo a cientos de colegas en Lima y el interior del país, que luchan por defender la auténtica libertad de prensa y de expresión, aquellos compañeros que respetan la dignidad personal, que defienden la dignidad del pueblo marginado y excluido, que son la voz de los que no tienen voz. César Lévano, Raul Wiener, César Hildebrant, Roberto Mejía Alarcón, Zuliana Lainez Otero, y otros dignos maestros del periodismo, a pesar de no tener espacio en los medios de alcance nacional e internacional, con su pluma, su voz y su imagen expresan el verdadero sentir del pueblo peruano.
En una Conferencia Magistral desarrollado en Bagua en el año 2009, después de algunos días de producirse el sanguinario baguazo y después de haber cerrado Radio La Voz, Roberto Mejía presidente de la ANP, dijo: "Ante la tanta majadería de aquellos periodistas a sueldo, mercenarios de la noticia y pagados por las empresas trasnacionales, la única esperanza está en nuestros compañeros jóvenes y de provincias, en aquellos que sufren en carne propia la pobreza, la injusticia, el abandono del ser humano, en aquellos que saben que son testigos que aun en pleno siglo XXI no se ha terminado la explotación del hombre por el hombre...ahí está la dignidad del hombre de prensa".
Una reflexión importante, que hoy se vive en el país. Los medios dependientes de la corrupción, de las mineras, del fascismo, de un gobierno ilegítimo, en fin del gran capital...a diario botan podredumbre, basura, violencia, miedo y odio; propia de una realidad ajena al Perú profundo. Sin embargo hace ya más de una década, esta clase de periodismo no tiene credibilidad en la población. En las últimas elecciones locales, regionales y nacionales, se mostró con absoluta claridad.
El pueblo sigue avanzando, la honestidad trabaja para gobernar el país. La prensa progresista, la intelectualidad, la iglesia, las organizaciones y el pueblo, firmes para defender los verdaderos intereses de las mayorías excluidas históricamente.
Sin embargo, hay retos. La lectura permanente, más investigación, contacto directo con el pueblo y difusión del nuevo modelo de desarrollo sostenible... ¡Por una gran región!, ¡Por un gran Perú!.
El pueblo sigue avanzando, la honestidad trabaja para gobernar el país. La prensa progresista, la intelectualidad, la iglesia, las organizaciones y el pueblo, firmes para defender los verdaderos intereses de las mayorías excludidas históricamente.
Sin embargo, hay retos: La lectura permanente, más investigación, contacto directo con el pueblo y difusión del nuevo modelo de desarrollo sostenible...¡Por una gran región!, ¡Por un gran Perú
Cajamarca, 26 de enero del 2012