viernes, 11 de diciembre de 2015

El reto de la izquierda peruana


Por: Segundo Matta Colunche


Norte, centro y sur. Auténtica representación del pueblo peruano.
La unidad de los movimientos regionales progresistas está más cerca que los tradicionales partidos de izquierda. Cajamarca, Junín, Moquegua, Amazonas, San Martín, Lambayeque, La Libertad, Piura y Puno han mostrado su disposición de participar juntos en las elecciones generales del 2016.

A pocas horas de vencerse el plazo para la concreción de alianzas de los partidos políticos con miras a participar en las elecciones del 2016, el panorama para la izquierda se presenta un poco sombrío. Mientras que, la derecha se prepara con todo su arsenal mediático para engrandecer a las limetizadas cúpulas que en cafetines se pusieron de acuerdo.

El Partido Aprista Peruano renunciando a sus umbrales pensamientos revolucionarios sella alianza con el Partido Popular Cristiano, el Movimiento Regional Chim Pum Callao y Vamos Perú (Callao), y Fuerza Loretana del ex presidente regional Iván Vásquez. Fuerza Popular y Peruanos Por el Kambio sólo han llamado a sus filas ciudadanos de la farándula y algunos ex funcionarios de gestiones anteriores.

Alianza Para el Progreso confirma alianza con Restauración Nacional. Perú Posible y el Partido Nacionalista Peruano aun sin rumbo. Sin embargo, la representación reaccionaria con claras propuestas de continuismo neoliberal lidera las preferencias electorales. Según Pulso Perú, Keiko Fujimori tiene 35%, PPK 14%, César Acuña 12%, Alan García 7%, Alejandro Toledo 4%, Verónika Mendoza 2%, Antero Flores Araoz 1%, otros 1%.

Existe un 27% de peruanos que hasta el momento no definen por quien votar (ninguno, nulos, blancos, no saben, no comentan). Sin embargo, un alto porcentaje de simpatía por los candidatos que lideran eventualmente las encuestas indica que cambiarían su voto si existe un candidato que represente los auténticos intereses de los peruanos. Según nuestra percepción, el porcentaje podría ser superior al 33% que tuvo Ollanta Humala en la primera vuelta  del 2010. Este espacio está allí, hasta el momento nadie lo explora.

Por el lado de la izquierda, el Frente Amplio no levanta cabeza y no quiere soltar la candidatura presidencial y su posible plancha congresal; en la fracturada Unidad Democrática existe candidato pero no partido, Democracia Directa se queda solo con sus afiliados fonavistas y en el Partido Humanista Peruano apunta a la casualidad. Varios de ellos, en nombre de la “democracia” ignoran los movimientos regionales que podrían sumar la lucha contra la derecha reaccionaria.

La izquierda peruana se ha encerrado en sus casillas y no ha podido hacer un análisis real de los liderazgos regionales convertidos en referentes nacionales. Para algunos analistas el vacío de esta suma a la candidatura provinciana de César Acuña. Empero, podría ser un revés para el candidato trujillano si se enarbola desde los sectores progresistas la candidatura de Gregorio Santos Guerrero acompañado de liderazgos regionales como Vladimir Cerrón de Junín y Walter Adyuviri de Puno.  Norte, centro y sur estarían representados.

Vídeo: Gregorio Santos habla de la auténtica unidad

A ellos, se sumarían importantes liderazgos regionales que tuvieron participación exitosa en el proceso electoral del 2014. Para Lima y Callao se organizaría un Plan Estratégico para captar a las principales figuras intelectuales, periodistas progresistas, líderes sociales, empresarios nacionales y connotados líderes de la izquierda peruana.


Por el momento, el Movimiento de Afirmación Social MAS avanza a inscribir ante el Jurado Nacional de Elecciones al Partido Político “Avanza País”; Vladimir Cerrón ha mostrado toda su disposición de concretizar la unidad con el Partido Político “Perú Libre”. Legalmente se tiene el  boleto para ingresar al “partido” del 2016 como afirmara “Goyo” en sus aspiraciones por construir un movimiento progresista nacional. Sin duda, el reto de la izquierda está más allá que tradicionales acuerdos en reuniones de café, la participación amplia del pueblo organizado sería la alternativa para alcanzar la victoria. Miremos el futuro con optimismo.