Por Segundo Matta
Colunche
La derecha reaccionaria
y sus amicales mediáticos arremeten con más fuerza contra Ollanta Humala por decir
dos cosas: “que Conga es intranscendente para el Perú, y haber expresado opinión contra la
concentración de medios.
En
la última entrevista que concedió el presidente de la República, Ollanta
Humala, a TV Perú, medio oficialista y estatal, entre otras cosas dijo: a)
“Conga es intrascendente para el Perú”, y luego replicó que éste ya no depende
del Estado sino de la empresa privada; como quien decir: Yanacocha puede hacer
lo que quiere con la finalidad de reiniciar sus operaciones, y b) “Es una vergüenza que en el Perú estemos
teniendo un grupo que sea prácticamente el dueño de los medios de comunicación
y que esto es peligroso”.
Ambas declaraciones le generaron duras críticas de la derecha reaccionaria y
sus más “conspicuos” voceros mediáticos.
El
expresidente aprista Alan García, de evidente cambio ideológico, comparó a las
declaraciones de Humala como el viraje al régimen Velasquista, de las
manipulaciones de Vladimiro Montesinos y del régimen chavista. Similar posición
tuvieron Keiko Fujimori (Fuerza Popular), Pedro Pablo Kuczynski (Perú+),
Lourdes Flores (Partido Popular Cristiano), Luis Castañeda (Solidaridad
Nacional), Carmen Omonte (Perú Posible), Fredy Otárola (Partido Nacionalista
Peruano) y Roque Benavidez (Yanacocha). Este último se animó a defender la
maniobra mediática del grupo El Comercio. ¿Pero cómo no van a defenderla si son
cómplices de tal artimaña?
En
el Perú las cosas se disfrazan de la noche a la mañana, los dueños del poder
mediático más reaccionario del país afirman que no es concentración de medios,
tampoco monopolio y menos acaparamiento. Ellos, sueltos de huesos, afirman que
lo que han formado es una “asociación” entre el grupo El Comercio y la Empresa
Periodística Nacional S.A. Epensa; su cinismo llega al extremo al indicar que
cada asociación maneja una línea periodística independiente, respetan la
pluralidad y libertad de prensa. La “asociación” es sólo para efectos de
impresión y distribución, dicen.
Finalmente en voz en cuello afirman ser “defensores
de la democracia y la libertad de prensa y expresión”. La respuesta lo tienen
los miles de peruanos que a diario transitan por las calles del Perú y ven en
los quioscos a todo este grupo con similares titulares y redacciones, en muchos
de los casos sin ajustarse a la verdad.
Todo
el andamiaje del grupo El Comercio orienta a que el gobierno atenta contra la
libertad de expresión y compara con dictaduras pasadas. Es una defensa cerrada
lejos de la realidad o quieren negarla intencionalmente.
Hoy
se puede apreciar una lucha sin cuartel por defender que el monopolio de las
comunicaciones siga centrando con más fuerza su poder mediático al servicio del
poder económico y la derecha reaccionaria, se alían con las voces más
recalcitrantes de la derecha para interpretar a su manera la Constitución, atacan
a todos quienes se cruzan por su camino en defensa de la auténtica libertad de
prensa y expresión, dividen a los gremios periodísticos como en tiempos de la
dictadura. El debate se desarrolla en
medio de calumnias y mentiras. Estilo propio del grupo El Comercio y sus
aliados.
Periodistas
que aplaudieron la dictadura, que no dijeron nada sobre los diarios chicha del
fujimontesinismo, que se subieron al carro de las coyunturas las veces que fue
posible, que cerraron espacios a la voz del pueblo, ahora se sienten víctimas
disque de intentar callar su voz. Deleznable posición que solo se puede
comparar con los ridículos de la mafia fujimontesinista, las dictaduras de Pinochet
(Chile), Porfirio Díaz (México), José
Videla (Argentina), etc.; quienes destrozaron la libertad de las personas y las
sometieron a las más crueles torturas, que terminó en desapariciones forzadas. Repudiable.
Es
hora en que los peruanos que pensamos que la libertad de expresión debe ser
respetada y estar al alcance de todos sin censura ni coacción, manifestemos nuestro
rechazo a la ilegal concentración de medios; desde todos los espacios sin
distinción alguna. No puede ser posible que en el Perú se aplauda la ilegal monopolización,
como dice César Aliaga Díaz, vicepresidente regional de Cajamarca: “No se debe
permitir el monopolio de la información porque la uniformiza”.
Ollanta
ha retrocedido, mientras el poder económico y la derecha lideran la defensa del
grupo mediático más reaccionario del país.