miércoles, 7 de mayo de 2014

Realidad Vs cinismo

Por: Segundo Matta Colunche

Luis Guerrero, vocero de Yanacocha en Cajamarca
Según el colombiano Armando Cortés, “en ningún lugar del mundo la pobreza se ha reducido en periodos pequeños de gobierno y en el peor de los casos con solo programas sociales (asistencialistas) insostenibles”; Sin embargo, la derecha peruana reaccionaria no cesa en atacar con cinismo al presidente regional, Gregorio Santos, acusándolo de ser responsable de la pobreza en Cajamarca: esto, luego que el INEI publicara cifras que ubican a esta región en el primer lugar de pobreza en el país.

Se rasgan las vestiduras,  pero no dicen que según estos mismos resultados (INEI 2013), Cajamarca ha disminuido la pobreza en 1.3%; mientras que regiones de Tacna, Ucayali, Piura, San Martín, Tumbes, Madre de Dios, Amazonas y Pasco; han aumentado entre 0.1% a 4.7%. Los medios reaccionarios y sus voceros callan en todos sus idiomas.

Es verdad que la región se ubica primero en pobreza porque las regiones de Huancavelica y Apurímac han tenido un crecimiento monetario superior al nuestro, pero esto no indica que es de entera responsabilidad del Gobierno Regional Cajamarca, puesto que durante los últimos 03 años, los recursos de inversión para la lucha contra la pobreza se han reconcentrado hasta en un 57.4% en el gobierno nacional, dejando al gobierno regional sólo 6.9% en el 2013.

No debemos olvidar que la pobreza no se define exclusivamente en términos económicos, también significa malnutrición, reducción de la esperanza de vida, falta de acceso a agua potable y condiciones de salubridad, enfermedades, analfabetismo, imposibilidad de acceder a la escuela, a la cultura, a la asistencia sanitaria, al crédito o a ciertos bienes”. Por eso, el vicepresidente regional César Aliaga no dudó en afirmar que los “opinólogos” hacen análisis simplistas. Una verdad que linda contra el cinismo.

Veamos: ¿Cómo los países han reducido la pobreza? Para conocer la realidad, tan solo algunos ejemplos: Honduras, de 64% en el 2003, logró reducir la pobreza al 42% en el 2013. ¿Cómo? Duplicando la cobertura en educación pre básica, logrando una cobertura del 95% en los dos primeros ciclos de educación básica, reduciendo a la mitad las tasa de desnutrición infantil, reduciendo la mortalidad materna de 147 a 73 por cada 100,000 nacidos vivos, logrando un 80% de cobertura de servicios de energía eléctrica,  triplicando la cobertura telefónica del país, equiparando y elevando en 20% el Índice de Desarrollo Humano relativo al género y reduciendo la vulnerabilidad ambiental del país, entre los principales. (Fuente: PNUD). Es decir, haciendo cosas, planteando y ejecutando alternativas; no repartiendo dinero en programas sociales insostenibles como hace el gobierno de Humala. 

Brasil, de 21% en el 2003 bajó al 11% en el 2013 ¿Cómo? Con intervención en programas de fortalecimiento del sector agropecuario y agroindustrial, integración de políticas públicas entre los diferentes niveles de gobierno, y programas orientados al cierre de brechas sociales (educación y salud). Chile (17,2% de pobreza al 2011), la exportación del cobre (empresa nacional), electrificación e inversión pública (infraestructura), son las fuentes principales de su PBI. Argentina: de 50.9% en el 2003 al 24.5% en el 2012, la ayuda social sólo representa el 15.3%; inversión en infraestructura, agroindustria, educación y salud, es el camino para avanzar en la disminución de la pobreza.

¿Qué pasa con nuestro vecino del norte, Ecuador?, según INEC, la pobreza se ubicó en  25,55%, pero esto se está revirtiendo gracias a programas nacionales orientadas a la educación inclusiva, salud, medio ambiente, infraestructura y electrificación que marcan la línea de la “revolución vecinal” de Correa.

Como vemos, ninguno de los países antes descritos priorizan los programas asistenciales. Estos tienen repercusión momentánea en la necesidad de gente. Ante ello, los recursos del Gobierno Regional Cajamarca, gestión 2011 – 2014, en su gran mayoría son orientados a programas sostenibles.


Volviendo a nuestra América Latina y El Caribe, pese a algunos avances, la pobreza afecta a 164 millones de personas (27.9%) y 68 millones se encuentran en indigencia. “Los programas asistenciales que la mayoría de países en vías de desarrollo aplican, no son la panacea ni menos permite el desarrollo integral de la persona”, afirma Armando Cortés, catedrático  e investigador de la Universidad de Cali-Colombia. “Necesitamos proyectos y programas sostenibles en el tiempo, para evitar desestabilización en la economía popular”, dice.