Por. Segundo Matta Colunche
Gregorio Santos, reelecto presidente regional de Cajamarca 2015-2018 |
Según
reporte de la ONPE al 100%, Gregorio Santos Guerrero, líder del Movimiento de
Afirmación Social (MAS) es el segundo porcentualmente más votado para
presidentes regionales con el 44.27%, después del Movimiento Kausachun de
Moquegua que obtiene el 49.07%.
Los insultos de la
derecha reaccionaria son casi normales en un país como el nuestro. Hoy por
ejemplo en su columna de opinión de Aldo Mariátegui (Perú 21), corrobora la
frase del presidente norteamericano Franklin Roosevelt cuando se refería al
dictador nicaragüense: “Puede ser que
Somoza sea un hijo de puta, pero es nuestro hijo de puta”. Finalmente
muestra su actitud de odio a la izquierda al indicar: “Por eso desprecio y ataco tanto a la izquierda peruana”. O sea
para escribir en un medio del grupo El Comercio hay que mover los sentimientos
antes que la razón.
Frente a los
insultos, la izquierda tiene que lanzar propuestas reales de cambio. El
politólogo Carlos Meléndez (Perú 21) afirma que la derecha latinoamericana es
incapaz de ofrecer alternativas atractivas: “sigue
anclada al pasado (Uruguay), no forma alternativas partidarias (Bolivia) y no
sabe capitalizar los errores del rival (Brasil)”. Pero, si algo podemos
decir de la derecha peruana, Juan Carlos Tafur ya bautizó hace algunos años:
“Derecha Bruta y Achorada”.
Los cierto es que
frente a las diatribas permanentes de sus voceros mediáticos, sectores
importantes del Perú profundo dieron lección el pasado 05 de octubre. La
derecha representada por los partidos tradicionales fue derrotada. En Cajamarca
la mayoría de gobiernos locales estarán en manos
de Movimientos Regionales, 98 de ellos que equivale al 77.17% serán
dirigidos por líderes que no tienen que rendir cuentas a las cúpulas limeñas,
frente al 22.8%, 26 gobiernos locales que dependen del partidos nacionales. Similar
panorama se presentó en las 25 regiones del país.
La
derecha reaccionaria buscaba por todos los medios deslegitimar al Movimiento de
Afirmación Social (MAS) y al liderazgo de Gregorio Santos. Durante casi 04 años
bombardearon mediáticamente la figura del líder izquierdista. Los resultados de
sus estrategias han sido catastróficos. Según reporte de la ONPE al 100%;
porcentualmente Santos es el segundo más votado (44.27%) después del Movimiento
Kausachun de Moquegua, que lidera Jaime Rodríguez (49.07%). En ésta región el
izquierdista Zenón Cuevas, ocupa un importante segundo lugar con el 39.11%. En
síntesis, la derecha reaccionaria mentirosa por antonomasia ha perdido el
respaldo de la población y solo le queda respirar por la herida.
¿Qué
es lo que se ha ganado en Cajamarca? La continuidad del proyecto regional
basado en sentar las bases del Nuevo Modelo de Desarrollo, la defensa de los
recursos naturales (agua), la protesta contra el centralismo limeño
vergonzante, la lucha por la descentralización y regionalización, la apuesta
por el fortalecimiento de las organizaciones sociales y su ansiada unidad, en
fin la defensa de la dignidad regional. ¿Quiénes fueron derrotados? El Gobierno
Central, las trasnacionales mineras como Yanacocha, los partidos tradicionales,
el Poder económico (Confiep, SNMPE, etc.), los medios de comunicación
reaccionarios, los tránsfugas, los
voceros mediáticos farsantes y quienes veían a Cajamarca como un pueblo
ignorante. Hoy estos sectores perdedores habla de “resistencia”, ¿Resistencia o
conveniencia insana de querer que un proyecto impopular vaya sí o sí cuando el
pueblo ya dijo: no? No existe resistencia sino conveniencia.
Mientras
la derecha sigue tiñendo de sangre las pantallas de televisión y las páginas de
los periódicos, mientras ellos siguen vociferando y negando la realidad; la
izquierda está avanzando en pos de: construir una Nueva Alternativa Política,
formar más cuadros “técnicos-políticos”, avanzar en la organización social
(desde abajo), construir movimientos y partidos políticos fuertes, disputarle a
la derecha la hegemonía en todos los sectores y fundamentalmente elaborar y difundir
el ansiado “Plan Nacional de Desarrollo”. El pueblo está ávido de abrazar las
banderas del cambio, el éxito también depende de quienes la dirijan.
La
derecha peruana tira barro como en Uruguay donde el reaccionario Pedro Bordaberry,
dijo que viene a la campaña para que haga mierda a Tabaré Vásquez. Y al igual que
en Uruguay han salido trasquilados por un pueblo digno.