miércoles, 6 de agosto de 2014

Mensaje de Humala: Camino sin rumbo

Por. Segundo Matta Colunche


Ollanta Humala rompió el compromiso con el Perú
Cambio climático, reformas de Estado, políticas públicas en seguridad ciudadana, regionalización y descentralización, fueron los grandes temas ausentes en mensaje del presidente Ollanta Humala, el pasado 28 de julio.
En medio de la más baja aprobación del gobierno de Ollanta Humala (22%, según GFK del diario La República), la desilusión y falta de interés por los mensajes presidenciales (sólo el 28% dice interesarle); apenas un 14% de peruanos cree en el anuncio presidencial. Las promesas incumplidas y la traición a su pueblo tienen un alto costo.
Para la derecha peruana (aristocracia limeña, prensa reaccionaria y partidos políticos), el mensaje de Ollanta tuvo un matiz importante en lo que se refiere a la inversión privada. Sin embargo, le faltó propuestas para frenar las “trabas burocráticas” para algunos trámites que permitan a las trasnacionales operar con mayor libertad en el país. No basta el “paquetazo económico” que da carta abierta a la impunidad y mayor riqueza a los grupos de poder económico (perdona deudas y aprueban Estudios de Impacto Ambiental en menos de 45 días). “Necesitamos confianza para la inversión privada”, dicen.
Humala, habló de cifras de crecimiento económico y poco lírico, en su discurso echó la culpa a la crisis internacional. Pero como adora el chip de palacio y la CONFIEP, dijo que el crecimiento económico define las políticas públicas en el país y por ello se avanzará a que recursos estratégicos de la patria como electrificación y petróleo vayan camino a ser administrados por manos privadas. El Comercio en sus últimas ediciones exclama que el agua, electrificación, salud, educación, carreteras, bosques, mar, puertos y aeropuertos deben avanzar a ser capitalizados con mayor presencia privada. Compara con los supuestos mejores servicios de “telefonía”, pero olvida la deuda histórica que tiene la trasnacional con el Estado Peruano. Cierra el espacio para el debate, se cree dueño de la verdad tras negar que sólo 13% del PBI venga de las mineras e ignoran que el más alto porcentaje de los peruanos se dedican a otras actividades (agricultura, manufactura, ganadería, construcción, finanzas, comercio, servicios) y es la que brinda al fisco 87% de ingresos. 
Más allá de las populistas propuestas como aumentar en 0,5% del PBI a educación o mejorar los servicios de salud y enfrentar con mayor fuerza la delincuencia dejó un desencanto en la mayoría de peruanos. No dijo nada sobre los conflictos sociomabientales a puertas de celebrar el COP2, no se tocó las reformas más importantes de Estado, se pasó por aire el fortalecimiento de la descentralización y regionalización del país, no hay un plan intergubernamental que permita luchar contra la delincuencia (exigencia mayor de la población), y pasó por alto la unidad sudamericana propuesta por los países integrantes del UNASUR, ignoró la masacre al pueblo palestino y otros pueblos de África y Medio Oriente quienes vienen sufriendo las consecuencias de una invasión salvaje Israelí-EEUU.
Los peruanos no conocemos que es lo que quiere el gobierno del país en mediano y largo plazo, qué hacer con normas que legalizan las mafias al interior de las instituciones del Estado y qué propuesta existe para terminar con la burocracia estatal.
No queda duda que la descentralización está en peligro. Hay 3 presidentes regionales presos incluido su más radical opositor, Gregorio Santos. Este último se enfrentó con el gobierno, las trasnacionales mineras (Newmont-Yanacocha), el poder económico (CONFIEP) y los grupos mediáticos reaccionarios (El Comercio). Desde que estalló el conflicto Conga exigían detención de Santos. Se consumó anticonstitucionalmente el pasado 27 de junio. Ningún gobierno regional ha expresado su cuestionamiento al continuismo neoliberal y paquetazo económico. Santos lo hubiese hecho y seguro en las próximas horas, pese a  las limitaciones carcelarias dará su opinión.
En medio de todo y ante un deslegitimado Congreso de la República y casi inexistente partido que lo respalda, Humala cumplió con su penúltimo discurso de 28 de julio. “Avanzamos sin rumbo”.