Escriben Congresistas por Cajamarca:
Jorge Rimarachin Cabrera
Luis Llatas Altamirano
¡¡ SOBERBIA MINERA NUNCA MÁS !!
Señores periodistas:
La Mesa de Diálogo convocada por el Primer Ministro para el día de hoy tiene un problema insuperable de representación, porque no están los actores principales del conflicto.
El problema que se busca solucionar mediante el diálogo, enfrenta a dos actores principales: Por un lado a la Empresa Minera Yanacocha y por el otro, al pueblo de Cajamarca.
Este problema irresuelto tiene una historia de 18 años y una lista de víctimas de al menos 8 muertos, más heridos, juicios y persecuciones (nunca reparados), mentiras y promesas incumplidas. Tiene actores viejos y nuevos.
Nosotros insistimos en la necesidad de la Mesa de Diálogo, donde deben estar todos sin exclusión: Por un lado la empresa minera Yanacocha y sus operadores. Nadie debe sustituir a nadie. Al frente tienen que estar, no solamente las autoridades electas de Cajamarca, sino también todos los enemigos que ha generado la minera en los últimos años. No deben faltar el Padre Marco Arana y el ambientalista Reinhard Seifert, entre otros.
Estamos en un sistema democrático de gobierno y un Estado Constitucional de Derecho. A nadie se le debe recortar su derecho de participar en la búsqueda de la solución del Problema Conga. A nadie se le debe suplantar. No tiene sentido convocar a autoridades y personalidades que no son del ámbito del proyecto.
Hacemos un llamado a las fuerzas políticas democráticas del Perú, para promover la gobernabilidad del país. Ello pasa hoy por hacer retroceder a la maquinaria política del poder minero que pretende perennizar sus privilegios, para lo cual apela al soborno, amenaza con encarcelar a quienes se les enfrentan, la represión y persecución para imponer en el país sus caprichos y sus mezquinos intereses mercantilistas, que hoy se expresa en la pretensión de devorar lagunas y colchones hídricos.
Los tiempos han cambiado y debe terminar la injerencia política de los mineros en los gobiernos. La soberbia minera nunca más.
Proponemos que el Gobierno cumpla el papel de facilitador, de árbitro y convoque a la mesa de diálogo a los dos actores principales de este conflicto, bajo una metodología que privilegie los consensos democráticos.
Lima, 27 de diciembre 2011
Jorge Rimarachin Cabrera
Luis Llatas Altamirano
MESA DE DIÁLOGO DEBE AFIRMAR LA DEMOCRACIA Y GARANTIZAR LA PARTICIPACIÓN DE TODOS LOS ACTORES
¡¡ SOBERBIA MINERA NUNCA MÁS !!
Señores periodistas:
La Mesa de Diálogo convocada por el Primer Ministro para el día de hoy tiene un problema insuperable de representación, porque no están los actores principales del conflicto.
El problema que se busca solucionar mediante el diálogo, enfrenta a dos actores principales: Por un lado a la Empresa Minera Yanacocha y por el otro, al pueblo de Cajamarca.
Este problema irresuelto tiene una historia de 18 años y una lista de víctimas de al menos 8 muertos, más heridos, juicios y persecuciones (nunca reparados), mentiras y promesas incumplidas. Tiene actores viejos y nuevos.
Nosotros insistimos en la necesidad de la Mesa de Diálogo, donde deben estar todos sin exclusión: Por un lado la empresa minera Yanacocha y sus operadores. Nadie debe sustituir a nadie. Al frente tienen que estar, no solamente las autoridades electas de Cajamarca, sino también todos los enemigos que ha generado la minera en los últimos años. No deben faltar el Padre Marco Arana y el ambientalista Reinhard Seifert, entre otros.
Estamos en un sistema democrático de gobierno y un Estado Constitucional de Derecho. A nadie se le debe recortar su derecho de participar en la búsqueda de la solución del Problema Conga. A nadie se le debe suplantar. No tiene sentido convocar a autoridades y personalidades que no son del ámbito del proyecto.
Hacemos un llamado a las fuerzas políticas democráticas del Perú, para promover la gobernabilidad del país. Ello pasa hoy por hacer retroceder a la maquinaria política del poder minero que pretende perennizar sus privilegios, para lo cual apela al soborno, amenaza con encarcelar a quienes se les enfrentan, la represión y persecución para imponer en el país sus caprichos y sus mezquinos intereses mercantilistas, que hoy se expresa en la pretensión de devorar lagunas y colchones hídricos.
Los tiempos han cambiado y debe terminar la injerencia política de los mineros en los gobiernos. La soberbia minera nunca más.
Proponemos que el Gobierno cumpla el papel de facilitador, de árbitro y convoque a la mesa de diálogo a los dos actores principales de este conflicto, bajo una metodología que privilegie los consensos democráticos.
Lima, 27 de diciembre 2011