Por Segundo Matta Colunche
Mensaje
a la Nación del presidente Ollanta Humala genera incertidumbre en temas
fundamentales.
Luego del mensaje
presidencial vino la enésima desilusión del pueblo peruano, la falta de
soluciones a problemas esenciales que afronta el país convierte al gobierno en
uno más que pasará a la historia sin atenderlos. Para varios analistas la luna
de miel acabó y las cifras positivas macroeconómicas ya no alcanzan para
contentar las calles.
NO HAY AVANCES
En última encuesta
publicada por Ipsos Perú del diario El Comercio, la población consultada considera
que el control de la delincuencia ha empeorado en 63%, ha mejorado 7%, sigue
igual 29%. Hay mucha desilusión en las mayorías.
A la pregunta sobre lo
peor del segundo año de gestión del gobierno humalista, la respuesta es
contundente: falta de seguridad 59%, el precio del gas no baja 54%, Ley del
Servicio Militar 26%, los conflictos sociales 22%, la educación no mejora 22%,
accidentes en las carreteras 15%, se ha hecho pocas obras 14%, la reforma del
servicio civil 10%, la intención del gobierno de comprar Repsol 9%. Sectores
importantes que no han tenido mejoras.
Los peruanos esperábamos
que tradicional mensaje presidencial se centre en temas de fondo, como: Plan de
Seguridad Ciudadana 62%, políticas del sector educación 43%, políticas del
sector salud 39%, estrategias frente a los conflictos sociales 27%, desarrollo
de infraestructura 19%, modernización del Estado y Ley del Servicio Civil 18%,
promoción de la inversión privada 12%. Temas que no se especificaron y que
algunos estuvieron ausentes.
Es importante describir
la percepción de la población sobre determinados temas. ¿Cuántos cambios hay en
el pensamiento del peruano? Pide infraestructura, pero exige educación, salud,
seguridad, medio ambiente sano. Valoramos su nivel de exigencia.
Con un mensaje similar a
los de los años 2011 y 2012, Humala inicia su tercer año de gobierno en medio
de una crisis marcada por quienes impusieron los intereses partidarios antes
que el bienestar general, aquello que con sabiduría se llamó “repartija”.
Marca la pauta de este
gobierno el retroceso en temas como la descentralización. Los recursos seguirán
manejados por la ineficiencia de los Ministerios, la mayoría de ellos por
debajo de las regiones en capacidad de inversión pública, pese a todo, los
gobiernos sub nacionales recibirán 26% menos de canon minero. ¡Qué curioso!: 20
años de minería en Cajamarca y aun así se le quita lo que por justicia le
corresponde.
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